Notas de la enfermera: Convulsiones
Cada mes, nuestro personal de enfermería comparte importantes actualizaciones sanitarias. Este mes, nuestras enfermeras ¡hablando de Convulsiones!
De los casi tres millones de estadounidenses con epilepsia, los ataques afectan a una de cada tres personas con discapacidades del desarrollo.
¿Qué es un ataque?
Una crisis epiléptica puede describirse como una alteración eléctrica repentina e incontrolada del cerebro que puede provocar cambios en el comportamiento, los movimientos, las sensaciones y la conciencia.
¿Cuáles son los distintos tipos de convulsiones?
- Ausencia (Petit Mal) – Incluye episodios de mirada fija e incapacidad para responder.
- Atónico – Se producirá una pérdida repentina del tono muscular, caídas o caída de objetos.
- Tónico – Provoca rigidez del cuerpo y de la parte superior de los brazos.
- Mioclónico – El individuo experimentará sacudidas del cuello, hombros, cuerpo y parte superior de las piernas.
- Tónico-Clónico (Grand Mal o Convulsivo) – Puede experimentar una pérdida de conciencia. La fase tónica incluye rigidez, caída y gritos, mientras que la fase clónica incluye sacudidas.
- Parcial simple – El individuo puede experimentar una pérdida repentina del tono muscular. El movimiento y las emociones también se ven afectados.
- Parcial complejo – Puede causar alteraciones de la conciencia y del recuerdo.
¿Qué puede desencadenar una crisis?
- Medicamentos olvidados o interacciones entre medicamentos.
- Aumento de la fiebre, enfermedad o infección
- Estrés y ansiedad elevados
- Cambios en el clima meteorológico
- Cambios hormonales
- Deshidratación
- Consumo de drogas y/o alcohol
- Falta de sueño
¿Cuáles son algunas opciones de tratamiento para las convulsiones?
- Medicamentos
- Cambios en el estilo de vida
- Modificaciones de la dieta
- Inserción de un estimulador del nervio vago
Cuando alguien tenga un ataque, siga estos pasos para garantizar la seguridad:
- Retire todo lo que rodee al individuo que pueda causarle daños o lesiones.
- No sujete al individuo ni le ponga nada en la boca.
- Siga las directrices de su formación en primeros auxilios.
- Asegúrese de seguir el protocolo de convulsiones de la persona y administre cualquier medicamento sólo como lo ordene o indique un médico.
- Llame al 911 si no conoce antecedentes de convulsiones o si se producen convulsiones consecutivas, ya que podrían ser mortales.
- Permanezca siempre con la persona hasta que sea plenamente consciente de su entorno y se asegure de que su estado respiratorio vuelve a la normalidad.
- Documentar la actividad convulsiva, incluida la intensidad y la duración.